Desconocemos la fecha de nacimiento y la muerte de este médico. El erudito y bibliógrafo Nicolás Antonio, en su obra Biblioteca Hispana (1672-1696), nos dice que nació en nuestra ciudad. Estudió medicina en la Universidad de Alcalá de Henares, donde ejerció la docencia hasta 1543. Posteriormente fue médico de cámara del rey Juan III de Portugal y profesor en la Universidad de Coimbra. Después de viajar por Europa, fijó finalmente su residencia en Sevilla, donde obtuvo la primera cátedra de Medicina y logró una gran reputación profesional. Allí, después de muchas relecturas y correcciones publicó dos obras: Libro de las enfermedades contagiosas y Tractado de la nieve y del uso della, obras de cotizada rareza. Hay que señalar en sus escritos una gran prudencia, capacidad de observación, independencia de criterio (frente a la costumbre de sangrar a un enfermo, la práctica de suministrarle abundante y buena comida) y sugestivo sentido del humor (frente al remedio de ungüentos para evitar la peste, la práctica de huir “y no muy cerca, sino lexos”). Son de gran interés en sus obras las numerosas anécdotas y observaciones sacadas de su propia experiencia.